Actualmente, la información disponible y los conocimientos de la población respecto a la salud reproductiva, la fertilidad y las TRA (técnicas de reproducción asistida) son temas recurrentes en multitud de noticias. Es abundante la información que, en ocasiones, reciben las parejas, incluso confusa, provocando un desconcierto y preocupación que agrava la situación, ya difícil de por sí.
A lo largo de la historia se han cometido atrocidades con seres humanos, y eso nos ha hecho reflexionar: ¿todo lo científicamente posible es éticamente aceptable?
La salud menstrual ha sido, durante siglos, la gran olvidada. Tuvimos que esperar hasta el pasado 2022 para que la OMS publicase una Declaración de la Alta Comisionada para los Derechos Humanos sobre la salud menstrual, en la que alegaba que ésta forma parte integral de los derechos a la salud sexual y reproductiva.
“La inteligencia artificial (IA) es la habilidad de una máquina de presentar las mismas capacidades que los seres humanos, como el razonamiento, el aprendizaje, la creatividad y la capacidad de plantear” (Parlamento Europeo, 2021).
La enfermería ha tenido diversos cambios y avances en los últimos años: profesionales, académicos y científicos. Sin embargo, estos no se han visto reflejados en la imagen que los profesionales de la comunicación proyectan sobre la profesión. Una imagen injusta y obsoleta que provoca una percepción social errónea de lo que son las enfermeras, qué hacen y la relevancia de su trabajo como agentes de salud.