En estos últimos años, las enfermeras nos estamos movilizando para, entre otras importantes reivindicaciones, luchar por el reconocimiento político, económico y social de los cuidados de enfermería.

Amparadas por cada vez mayor evidencia científica, parece incoherente pretender invisibilizar la importancia e impacto que los cuidados tienen en la salud de la ciudadanía. No obstante, pese a ello, nuestra presencia y capacidad de actuación en espacios de participación política es ardua y muy limitada.

Es por tanto que, cada vez somos más enfermeras las que, alzamos la voz para visibilizar que nuestra perspectiva del cuidado sea tenida en cuenta en aquellos espacios donde tiene lugar la toma de decisiones y elaboración de estrategias que ineludiblemente influyen e influirán en la salud de nuestra población.

Sin embargo, para muchas de nosotras, la participación enfermera en mundo de la política y sus entresijos es una gran desconocida. ¿Realmente tenemos cabida como profesionales en las mesas de decisión? ¿Qué podemos aportar las enfermeras desde la perspectiva del cuidado?

Quizás, el primer paso que debamos dar, sea creer en nosotras mismas como profesionales y comprender en profundidad todo aquello que realmente aportamos a la sociedad y que se traduce en resultados en salud. Una vez demos ese primer paso, debemos continuar avanzando, aprendiendo las herramientas necesarias que nos faciliten el día de mañana defender una política mejor que coloque el cuidado de las personas en el centro de su razón de ser.

Este mes, desde la Escuela de Liderazgo, destinaremos parte de la formación al desarrollo de la competencia política. Próximamente, a partir del día 8 de abril. 

Blanca García Flores
Supervisora de Docencia. OSI Araba