Hace ya casi un año empezábamos la sexta edición del Experto de Gestión y Calidad asistencial desde el liderazgo enfermero y hace ya casi un año comenzaba la primera clase en la que os citaba una frase de una mis grandes referentes, Elvira Cobas: “Ningún copo de nieve cae en el lugar equivocado”. Y es que, ahí, estabais vosotros, en este sitio, con este grupo, y todo, aunque no lo sabíais, tenía un porqué.
Juntos hemos recorrido un viaje de crecimiento y desarrollo y, para poder recorrerlo, os entregaba una llave: ”Nuestra llave”. Estas llaves no sabemos por qué tienen el poder de daros esa fuerza para cerrar aquellas puertas que, hasta ahora, no os habíais atrevido a abrir y, para muchos de vosotros, este viaje ha servido para abrir puertas hacia otros destinos personales y profesionales.
Y es que, como ningún copo de nieve cae en el lugar equivocado, estabais aquí por y para algo
Cada copo con su forma única y especial ha ido conformando un nuevo enjambre: el enjambre de la VI edición del Experto de Gestión y Liderazgo. Esta edición, además, tiene un carácter especial, pues nos hemos vuelto a encontrar al 100% dejando atrás aquellos tiempos donde permanecíamos separados por mamparas y pantallas. Nos hemos vuelto a sujetar “literalmente” los unos y los otros para conseguir un objetivo común y construir unos lazos que espero y deseo que nos mantengan conectados más allá de esta formación.
Y es que esta imagen vale más que mil palabras:
Y ahora me toca a mí pediros algo y es que cojáis toda esa energía, toda esa experiencia que hemos vivido y compartido y voléis todo lo alto que podáis soñar como decía Frida. Así que, ahora, ya sois líderes competentes y capacitados. Recordad que un gran poder lleva consigo una gran responsabilidad. Tenéis ahora la responsabilidad de remar, de sumar y de ser la mejor versión que podéis ser. Como os decía Pilar es la hora de soltar nuestra mano, aunque esta siempre será vuestra casa.
Hoy es momento de cerrar este ciclo y devolver esa llave que os otorgamos y os ha acompañado para dársela a la siguiente edición. De mi llave de este año y de este enjambre me llevo su compromiso, su cariño y sus ganas de cambiar las cosas.
Gracias a todos por el cariño con el que habéis depositado estas llaves, las guardaré como un tesoro para hacerlas volar a quienes deba llegar cuando empiece la próxima edición.
Nuestro enjambre sigue creciendo, y vosotros, una edición especial en la que me he reído muchísimo y he conectado con aquella niña que quería ser enfermera. Me llevo vuestro cariño, nuestras risas hasta llorar y todos los abrazos que me habéis regalado.
Una última cosa y ya con alguna lagrimilla en los ojos: os pido que no cortéis el cordón que nos une porque juntas, recordad, somos infinitas.
