«En España hay más de 350.000 donantes de médula ósea tipificados y más de 70.000 unidades de sangre de cordón umbilical almacenadas; aunque esto pueda parecer un buen número, en realidad somos millones las personas candidatas a ser donantes».
#OpiniónFUDEN por Raquel Carcereny
El 21 de septiembre se celebra el día Mundial del Donante de Médula Ósea y Sangre de Cordón Umbilical organizado por la World Marrow Donors Association (WMDA) y el día 27 de septiembre el Día Europeo del Donante de Médula Ósea. El objetivo de estos días, mundial y europeo, es agradecer a los donantes de médula ósea y sangre de cordón umbilical por su solidaridad, sean familiares de donantes o no, a las personas que ya pudieron llevar a término la donación y a las que en un futuro puedan serlo si son compatibles con alguien que necesite sus células madre para seguir viviendo.
Días como estos se hacen necesarios para sensibilizar e informar al conjunto de la población sobre la importancia de la donación de células madre, siendo una de las posibilidades de donación en vida que podemos realizar. Muchas personas desconocen para qué se necesita, tienen ideas erróneas acerca del procedimiento o manifiestan inquietudes y miedos ante una posible donación. En la actualidad, la extracción de sangre medular (células madre hematopoyéticas) puede ser a través de la punción en las crestas ilíacas (se realiza en el quirófano bajo sedación) o mediante la extracción de sangre venosa periférica por citoaféresis, siendo esta última la técnica más empleada.
Es nuestro deber informar correctamente del procedimiento y de lo que implica inscribirse como donante en los Bancos de SCU (sangre de cordón umbilical) y el Registro de Donantes de Médula Ósea (REDMO) del que disponemos, así como el compromiso que se asume de estar en disposición de llevar a cabo la donación para cualquier persona del mundo que lo necesite. Actualmente, en España hay más de 350.000 donantes de médula ósea tipificados y más de 70.000 unidades de sangre de cordón umbilical almacenadas y aunque esto pueda parecer un buen número, en realidad somos millones las personas candidatas a ser donantes; obviamente, las posibilidades de encontrar compatibilidades aumentan a medida que aumenta también el número de candidatos a donar. Por suerte el registro traspasa fronteras y se suma a los donantes en el registro internacional (Red BMDW), ampliando así las oportunidades para encontrar personas compatibles.
Hoy en día nadie está a salvo de que se le sea diagnosticado un cáncer y, en muchas ocasiones, para los tumores de la sangre, como puede ser la leucemia, el tratamiento es el trasplante de células madre que sería posible a través de la donación del cordón umbilical o de la médula ósea de una persona compatible.
Cuando una embarazada quiere ser donante de sangre de cordón umbilical debe dirigirse a uno de los Bancos de Sangre de cordón existentes en España para recibir la información del proceso y firmar el consentimiento informado. Los datos referentes se remiten al REDMO. Esta información debería de proporcionarse en las visitas con la enfermera especialista en enfermería obstétrico-ginecológica para concienciar a las gestantes sobre esta posibilidad.
Cuando una persona quiere ser donante de médula ósea y cumple con los requisitos para serlo tiene que acudir a un centro de referencia cercano a su lugar de residencia, firmar un consentimiento informado y realizarse una extracción sanguínea para inscribirse como donante en REDMO.
No es fácil ser compatible con una persona que lo necesita, sólo entre un 25-30% de los pacientes tienen posibilidad de encontrar un donante familiar compatible, de ahí la importancia de ser donantes voluntarios, altruistas y generosos para aumentar esa ratio.
Tiene que ser muy emocionante que algún día te llamen de REDMO para comunicarte que eres compatible con alguna persona en algún lugar del mundo y quizás haya llegado el día en el que vas a poder contribuir a salvar una vida.
Es importante que exista una mayor sensibilización y divulgación sobre este tema; para ello, es necesario que el profesional de enfermería estudie y transmita la información actualizada y correcta y que pueda resolver las dudas de las personas a las que atendemos, ser proactivos y proporcionarles la ayuda necesaria.
Raquel Carcereny
Enfermera Especialista EFyC y Responsable de Comunitaria y Formación EIR