Descripción
El trabajo en equipo hace referencia a un pequeño grupo de personas que posee conocimientos, experiencias y habilidades que se complementan con el resto, los cuales integran sus capacidades para el cumplimiento de determinados objetivos y llevar a cabo actividades inclinadas hacia la consecución de las mismas. Un equipo busca conseguir una serie de metas comunes, para ello el equipo se origina con el compromiso de que las metas propuestas sean logradas en base al conocimiento, técnicas, capacidades, y por consiguiente las habilidades de quienes lo conforman.
El funcionamiento de los grupos va a estar sujeto a la composición de sus integrantes. Mientras más similares son los integrantes, resulta mucho más sencillo a los miembros identificarse con los objetivos y tareas organizacionales. A medida que se convierten en equipos, cada uno de los integrantes asumen los riesgos del conflicto a la vez que asumen responsabilidades, que incluyen tener en la mira propósitos comunes como establecer conjuntos de metas entre otros.
En un equipo operativo cada miembro contribuye al conjunto, por lo que señalar al líder como la persona responsable del éxito del equipo sería distorsionar la imagen, pues estaríamos ignorando la importancia de todos los miembros del equipo. Por otra parte, un equipo sin líder puede perder fácilmente el rumbo y olvidar sus objetivos principales. El líder que cree una atmósfera de trabajo donde todos puedan contribuir (por lo que el equipo se beneficia de las habilidades y de los conocimientos de sus miembros), aunque suponga cederle responsabilidades a los demás de vez en cuando, contribuirá al éxito del equipo.
No existe ninguna cualidad determinante que haga que una persona sea líder. Sin embargo, lo que sí se puede confirmar es que cuantas más cualidades positivas tenga una persona, más posibilidades tiene de ser líder.