La Organización Mundial de la Salud, OMS, ha anunciado la creación de una Comisión de Alto Nivel sobre enfermedades no transmisibles (ENT), las también denominadas enfermedades crónicas, con el objetivo de definir nuevas estrategias centradas lograr el aumento de la esperanza de vida de las personas que sufren este tipo de enfermedades así como el incremento de su bienestar. Las enfermedades cardiovasculares, el cáncer, la diabetes, las enfermedades respiratorias y diversos trastornos mentales están incluidas dentro de la denominación de enfermedades no transmisibles.
Según datos de esta organización, este tipo de enfermedades son la causa de muerte de 40 millones de personas cada año, es decir, un 70% del total de las muertes que se producen en el mundo. Los decesos por enfermedades cardiovasculares alcanzan 17,7 millones cada año, el cáncer 8,8 millones, las enfermedades respiratorias 3,9 millones y la diabetes 1,6 millones. Alrededor de 15 millones de estos fallecimientos se dan en personas de 30 a 69 años.
Enfermería y enfermedades no transmisibles/crónicas
“El papel de los profesionales de la salud, en concreto de la enfermería” según señalan desde la Fundación para el Desarrollo de la Enfermería, FUDEN, “es clave en este tipo de enfermedades principalmente en el ámbito de la prevención y educación para la salud”. Los datos recogidos por diversos estudios han demostrado que la inactividad física, las dietas inadecuadas, el consumo de tabaco o de alcohol incrementan el riesgo de muerte en las personas que sufren este tipo de enfermedades por lo que es fundamental incidir en este ámbito con cada persona. “Asimismo, los cuidados enfermeros relacionados con la cronicidad o la dependencia” apuntan desde la Fundación, “son imprescindibles para asegurar una buena calidad de vida a estas personas y lograr incrementar su esperanza de vida”.