17 de noviembre Día Mundial del nacimiento prematuro

Nov 13, 2019

«En España nacen aproximadamente 28.000 prematuros al año, una de las tasas más altas de Europa». #OpiniónFuden por Irene Núñez

Desde el año 2011 se conmemora cada 17 de Noviembre el Día Mundial del Nacimiento Prematuro. Se trata de una iniciativa propuesta por EFCNI (European Foundation for the Care of Newborn Infants), al considerarse uno de los grandes problemas de morbilidad y una de las primeras causas de muerte en niños menores de 5 años. Cada año se reivindica un derecho para estos pequeños y el objetivo de este año 2021 para el Día Mundial de los Niños Prematuros es mantener juntos a los padres y los niños prematuros, ya que la separación no es bueno para estos niños.

El diseño distintivo de esta iniciativa lo compone un tendedero del que cuelgan diez pares de calcetines, uno de ellos de menor tamaño, representando éste la estadística mundial de que 1 de cada 10 bebés nacen antes de tiempo (Socks for life).
En España nacen aproximadamente 28.000 prematuros, es decir, existe una tasa del 7% de los recién nacidos que nacen antes de las 37 semanas de gestación, una de las tasas más altas de Europa. Esto nos obliga a prestar una especial atención en el entorno sanitario, donde nosotras, las enfermeras, jugamos un papel primordial, desde su nacimiento, pero también durante su desarrollo, que debemos seguir con cautela y consideración. Nuestra profesión, sin embargo, no termina en el pequeño paciente, pues acompañará, también, a los padres y a la familia y los involucrará en el meticuloso cuidado del prematuro.

Cuidados al prematuro

En su primera etapa de ingreso las enfermeras debemos asegurar la estabilidad del pequeño y que los procedimientos que precise no dañen su futuro desarrollo. Los cuidados que recibe son especiales y fundamentales para el presente pero, sobre todo y también, para el futuro. La enfermera, con la minuciosidad y precisión que caracteriza sus cuidados, deriva su atención al cuidado integral basado en cubrir sus necesidades; se encarga de la atención meticulosa de estos pacientes para que reciban un cuidado integral basado en cubrir sus necesidades, además de garantizar sus derechos como sujeto. Además, es primordial que organicemos al resto del equipo para garantizar periodos de descanso y con ello llevar a cabo la “mínima manipulación”, imitando el útero materno, ya que todos los agente externos (luz, ruido, dolor, manipulación…) influirán negativamente en su desarrollo neurológico.

Durante el ingreso de los prematuros es muy importante el trabajo de las enfermeras con la familia, ya que son el contacto directo con los padres y hacen de nexo al mismo tiempo que los contienen y les enseñan a cuidar de su bebé. Enfermería debe involucrar a los padres lo antes posible en el cuidado de sus hijos y así fomentar el apego en el que muchas veces las hospitalizaciones prolongadas actúan como obstáculo para el vínculo familiar.

Pero no todo queda en un extenso ingreso hospitalario sino que la enfermería continúa el seguimiento de estos pacientes una vez dados de alta, llevando a cabo la valoración y cuidados del desarrollo de estos pequeños. Esto es parte de nuestra esencia, no sólo en neonatos, sino en cada una de las especialidades enfermeras, caracterizadas por nuestra profunda implicación en los pacientes, de principio a fin. Estos bebés requieren cuidados especiales por su condición de prematuros y las complicaciones propias de haber nacido antes de tiempo. Por todo ello, es necesario tengamos los conocimientos, las habilidades e idoneidad necesarios, y actualizados, para realizar las intervenciones oportunas; los cuidados que reciban en ese momento determinarán, en gran medida, su desarrollo. Es nuestra responsabilidad.

Irene Núñez López
Tutora formación área Neonatos FUDEN. Enfermera UCIN H.U. 12 de Octubre. Madrid.