Cuidados al paciente quemado

Descripción

La piel es el órgano más grande, más fino y uno de los más importantes del cuerpo humano. Sus funciones son fundamentales para mantener la homeostasis y la supervivencia. Las quemaduras representan una de las patologías más frecuentes, graves e incapacitantes, siendo los accidentes domésticos, de tráfico y laborales sus principales causas.

Según la OMS cada año mueren 180.000 personas en el mundo por quemaduras, sin embargo, la incidencia de quemaduras en España es desconocida. Se estima que 3 de cada 1.000 habitantes sufren cada año quemaduras que requieren atención médica, la mayoría son atendidos en Atención Primaria y entre el 15-20% requieren ingreso hospitalario. Del mismo modo, se estima que las lesiones por quemaduras no fatales son una de las principales causas de morbilidad.

Para disminuir la morbimortalidad y las complicaciones propias de las quemaduras es fundamental un enfoque diagnóstico y terapéutico inicial eficaces. El tratamiento de las quemaduras requiere un cuidado específico, establecer un protocolo de actuación y una rápida coordinación entre los distintos niveles asistenciales, exigiendo una constante actualización que garantice unos cuidados óptimos.