Descripción
El maltrato infantil se considera desde 1999 según la OMS (Organización Mundial de la Salud) un problema de salud pública. Como consecuencia del daño ocasionado a la víctima (físico y emocional), a la familia (económico y emocional) y a la comunidad (económico y social), este debe tratarse como una cuestión médico-social-legal y no como un problema aislado.
El maltrato infantil, como expresión máxima de desamparo y desprotección, es un problema social y de salud de primer orden. Su importancia real en nuestro medio es desconocida al ignorarse en gran medida la epidemiología, factores predisponentes, clínica, formas de detección, diagnóstico, secuelas a corto, medio y largo plazo y mortalidad en la totalidad y en cada uno de los tipos de maltrato. Otro aspecto muy importante a tener en cuenta es el impacto económico generado por el maltrato infantil. Este tipo de violencia no solo afecta a la víctima y a su entorno, sino a toda la sociedad, repercutiendo en el desarrollo económico del estado en su conjunto, dado que genera elevados gastos en costes sanitarios, jurídicos, sociales y educativos.
El maltrato infantil es un problema de salud pública, de escasa visibilidad cuya incidencia está aumentando de forma alarmante en los últimos años. Al mismo tiempo detectar que un menor está siendo maltratado es una tarea muy compleja. El personal de enfermería ocupa una posición privilegiada y fundamental a la hora de detectar y prevenir estas situaciones, especialmente aquellos enfermeros/as que trabajan en áreas asistenciales como urgencias, atención primaria y hospitalización, en el área pediátrica, donde las continuas revisiones realizadas dentro del programa del niño sano, o en la atención de lesiones sospechosas de malos tratos pueden dar la señal de alarma.
La prevención del maltrato infantil debe integrarse en la formación de los profesionales de enfermería, en universidades y postgrados ya que es fundamental para saberlo detectar y actuar, siendo preciso que el colectivo enfermero que está en contacto más directo con el niño tengan la formación y los conocimientos adecuados con el fin de prevenir y tratar de manera temprana este problema.